Al conocer la vida y obra de Juan Vargas Puebla encontramos gran similitud con las de su maestro Luis Emilio Recabarren.
Ambos comenzaron a laborar como obreros a los 14 años de edad. Dedicaron sus mejores esfuerzos a la unidad y organización de los trabajadores. También los dos dieron importancia a la educación de los asalariados. Crearon prensa obrera, escribieron artículos, folletos y libros; impulsaron la cultura popular, en especial el teatro obrero. Dieron gran importancia al Día Internacional de los Trabajadores. Comprendieron la importancia de la lucha ideológica y la libraron tesoneramente. Ambos fueron de palabra elocuente y convincente.
Los dos fueron diputados obreros, de ejemplar actuación dentro y fuera del Parlamento.
Enfrentaron con valor y audacia a los reaccionarios. Es conocida la ocasión en que Recabarren respondiendo el desafío de un derechista cantó La Internacional en plena sesión de la Cámara. Juan Vargas tampoco se achicó ante los enemigos de clase.
Juan Vargas Puebla, a igual que Recabarren, fue un firme defensor de sus principios y un apasionado dirigente de los trabajadores, pero siempre mantuvo un trato respetuoso y fraterno con quienes laboraban a su lado.